jueves, 17 de marzo de 2011

Hibernación (Osho)


Foto de Arpana Vidroh

A veces sois fríos, a veces no. Pero no creéis un problema de ello. Cuando os
sintáis de ese modo, sed consecuentes, y no os sintáis culpables por ello.
No hay necesidad de ser cálidos las veinticuatro horas. Eso sería agotador. Uno también
necesita descansar.
Cuando sois fríos, la energía se mueve hacia dentro; cuando sois cálidos, la energía va
hacia fuera. Por supuesto que otras personas querrían que siempre fuerais cálidos, porque solo
en ese caso vuestra energía se mueve hacia ellas. Cuando sois fríos, vuestra energía no se
mueve hacia ellas, de modo que se sienten ofendidas. No se sienten bien, de manera que os
dirán que sois reservados. Pero sois vosotros quienes lo decidís.
En esos momentos hibernáis, os retraéis al interior de vuestro ser. Son los momentos de
meditación. Así que esta es mi sugerencia: cuando os sintáis reservados, cerrad las puertas de
las relaciones y alejaros de la gente. Cuando os sentís reservados, id a casa a meditar. Ese es
el momento adecuado para hacerlo. Con la energía moviéndose hacia el interior, podéis ir
sobre ella hasta el núcleo de vuestro ser. Os aportará interioridad, y muy fácilmente. No habrá
lucha. Simplemente podéis seguir la corriente. Y cuando os sintáis más cálidos, moveos hacia
el exterior. Olvidaos de la meditación. Sed cariñosos. Utilizad ambas cosas y que no os
preocupéis.