jueves, 17 de diciembre de 2009

De Osho

Foto de Arpana Vidroh


La sociedad nunca te enseña a estar alerta

¿Por qué el hombre reprime tanto y se vuelve enfermizo? Porque la sociedad te enseña a controlar, no a transformar, y el camino de la transformación es totalmente diferente. Para algunas cosas, no es en absoluto una manera de control, es precisamente lo opuesto.

Lo primero: al controlar tú reprimes, en la transformación expresas.

Pero no hay necesidad de expresar sobre alguien más, porque el “otro” es simplemente irrelevante. La próxima vez que te sientas enojado ve y corre alrededor de la casa siete veces, y después siéntate debajo de un árbol y observa dónde ha ido el enojo. Tú no lo has reprimido, no lo has controlado, no se lo has arrojado a alguien más — porque si lo lanzas a otro se crea una cadena, debido a que el otro es tan tonto como tú, tan inconsciente como tú. Si lo lanzas a otro, y si el otro es una persona iluminada, no habrá problema; él te ayudará a arrojarlo y liberarlo y a pasar por una catársis. Pero el otro es tan ignorante como tú; si le lanzas enojo él reaccionará. Él te lanzará más enojo, él está tan reprimido como tú. Entonces se hace una cadena: tú se lo lanzas a él, él te lo lanza a ti, y ambos se vuelven enemigos.

No se lo arrojes a nadie. Es igual que cuando sientes ganas de vomitar: tú no vas y vomitas sobre alguien. La cólera necesita un vómito. ¡Tú vas al cuarto de baño y vomitas! Limpia el cuerpo entero — si reprimes el vómito será peligroso, y cuando hayas vomitado te sentirás fresco, te sentirás liberado de un peso, descargado, bien, sano. Algo estaba mal en el alimento que tomaste y el cuerpo lo rechaza. No continúes forzándolo dentro.

La cólera es sólo un vómito mental. Algo que has tomado está mal y todo tu ser psíquico desea arrojarlo, pero no hay necesidad de arrojarlo sobre alguien.

Como la gente lo arroja sobre otros, la sociedad les dice que lo controlen.

No hay necesidad de arrojar cólera sobre nadie. Tú puedes ir a tu cuarto de baño, puedes dar una larga caminata — que quiere decir que algo en el interior necesita una rápida actividad para que sea liberado. Sólo trota un poco y sentirás que está liberado, o toma una almohada y golpea la almohada, lucha con la almohada, y muerde la almohada hasta que las manos y los dientes estén relajados. En el transcurso de una catársis de cinco minutos te sentirás descargado, y una vez que conoces esto nunca lo arrojarás sobre nadie, porque eso es absolutamente estúpido.

La primera cosa en la transformación entonces es expresar la cólera, pero no sobre otro, porque si tú la expresas sobre otro no puedes expresarla totalmente. Puede que te guste matar, pero no es posible; puede que te guste morder, pero no es posible. Pero eso se le puede hacer a una almohada. Una almohada quiere decir “ya iluminado”; la almohada está iluminada, es un buda. La almohada no reaccionará, y la almohada no irá a ninguna corte, y la almohada no traerá
ninguna enemistad contra ti, y la almohada no hará nada. La almohada será feliz, y la almohada se reirá de ti.