jueves, 5 de mayo de 2011

ESQUIZOFRENIA(Osho)

Foto de Arpana Vidroh
La culpabilidad siempre crea esquizofrenia. Y puede lograrlo; si es muy
profunda, puede crear una verdadera escisión.
No existe división entre el mundo y la espiritualidad. Pero debido al fenómeno de la
culpabilidad esa división surge. De modo que hay que descartar la culpabilidad. No es que
tengáis que unir la espiritualidad y el mundo; están unidos. No hay modo de separarlos. Lo
que debéis hacer es entender vuestra culpabilidad y desprenderos de ella, de lo contrario
siempre crea esquizofrenia. Y puede lograrlo; si es muy profunda, puede provocar una
verdadera escisión. Una persona puede convertirse en dos, de tal manera que es capaz de no
ser consciente de la otra. La división puede ser tan marcada que los dos aspectos no lleguen a
conocerse jamás, que nunca se produzca dicho encuentro.
Debéis comprender vuestra culpabilidad. Moveos con toda la naturalidad que os sea
posible y no digáis que algo es «espiritual» y otra cosa es «mundana». Esa misma
categorización está mal porque es entonces cuando nace la división. En cuanto etiquetáis algo
como espiritual, de pronto habéis condenado al mundo. Cuando decís que algo es mundano,
ha surgido la división. No hay necesidad de ello.
No dividís cuando veis la luna por la noche y la disfrutáis, y luego un día veis a un niño
sonriendo y también disfrutáis. ¿Qué es espiritual y qué material? Veis una flor abrirse y algo
se abre en vosotros que os hace regocijaros. La comida se está preparando, toma el sabor y de
repente hay gozo en ello. ¿Qué es espiritual y qué mundano?