martes, 17 de agosto de 2010

Pecado (Osho)

Foto de Arpana Vidroh

Reprimir cualquier cosa es un crimen: mutila el alma. Presta más atención al
miedo que al amor, y eso es lo que es el pecado.
Prestar más atención del miedo es un pecado, prestar más atención del amor es una
virtud. Y recordad siempre prestar más atención del amor, porque es a través del amor como
se alcanzan las cumbres más elevadas de la vida, hacia Dios. Por el miedo no se puede crecer.
El miedo mutila, paraliza: Crea un infierno.
Todas las personas paralizadas -me refiero psicológica y espiritualmente paralizadasviven
la vida en el infierno. ¿Y cómo lo crean? El secreto radica en que viven en temor; solo
hacen algo determinado cuando no hay, miedo, pero entonces no hay nada que merezca la
pena hacerse. Todo lo valioso está rodeado de ciertos temores. Si os enamoráis, hay miedo,
porque podríais ser rechazados. El miedo dice: «No os enamoréis, entonces nadie os
rechazará». Eso es verdad -si no os enamoráis, nadie os rechazará jamás-, pero así llevaréis
una existencia sin amor, que es mucho peor que ser rechazado. Y si alguien os rechaza, alguna
otra persona os aceptará. La gente que vive con miedo piensa más en no cometer errores. No
comete ningún error, aunque tampoco hace nada más; su vida está en blanco. No contribuye
en nada a la existencia. Viene, existe, o más bien vegeta, y luego muere.